Ingredientes para 4 personas
8 manos de cerdo cocidas y deshuesadas
2 hojas de pasta Philo o Brick (producto comercial)
200 grs. de cantharellus cornucopioides
8 caracoles, limpios, sin cloaca y fuera de la carcasa (casa)
15 cl. de salsa vizcaína
1cl. de aceite de oliva
Proceso
Una vez de cocidas las manos y quitados los huesecillos (en caliente), cortamos en trocitos las setas y las salteamos a fuego vivo durante unos instantes, las añadimos a las manos de cerdo, las ponemos en una bandeja rectangular, las dejamos enfriar y las metemos a la nevera (debe de adquirir mucha consistencia), las desmoldamos y hacemos rectángulos de 6 centímetros por lo que de de alto, cortamos la pasta elegida y las envolvemos en ella, ponemos una sartén antiadherente al fuego con un poco de aceite (una cuchara de café) depositamos las manos en ella y las doramos ligeramente por todas partes, las metemos el horno a 180 º durante 3 minutos, salteamos los caracoles con un poco de aceite.
Servicio
Disponemos la salsa vizcaína sobre el plato (muy poca) las manos encima y decoramos con los caracoles.
Daniel García
15 cl. de salsa vizcaína
1cl. de aceite de oliva
Proceso
Una vez de cocidas las manos y quitados los huesecillos (en caliente), cortamos en trocitos las setas y las salteamos a fuego vivo durante unos instantes, las añadimos a las manos de cerdo, las ponemos en una bandeja rectangular, las dejamos enfriar y las metemos a la nevera (debe de adquirir mucha consistencia), las desmoldamos y hacemos rectángulos de 6 centímetros por lo que de de alto, cortamos la pasta elegida y las envolvemos en ella, ponemos una sartén antiadherente al fuego con un poco de aceite (una cuchara de café) depositamos las manos en ella y las doramos ligeramente por todas partes, las metemos el horno a 180 º durante 3 minutos, salteamos los caracoles con un poco de aceite.
Servicio
Disponemos la salsa vizcaína sobre el plato (muy poca) las manos encima y decoramos con los caracoles.
Daniel García
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